Ricardo Buryaile, diputado nacional y exministro de Agroindustria en el Gobierno de Mauricio Macri, presentó un proyecto de ley para que sea el Congreso quien, en cumplimiento del artículo 75 inciso 1 de la Constitución Nacional -allí se menciona que es ese cuerpo quien debe legislar en materia de derechos de importación y exportación-, fije precisamente los aranceles de importación y exportación previa propuesta de los mismos por parte del Poder Ejecutivo.
Pablo Torello, diputado nacional que también está en el espacio de Juntos por el Cambio, por su parte acercó al Congreso una iniciativa de baja gradual. En el marco de un proyecto para crear un “Régimen de Fomento al Desarrollo Agroindustrial” en un capítulo se mete con los derechos de exportación, informaron a La Nación.
“Para aquellos productos en los que la medida será de mayor impacto fiscal, como el trigo, el maíz, la soja y sus derivados este proyecto prevé la reducción gradual del gravamen en 3 puntos porcentuales anuales hasta la eliminación del mismo en un plazo de 2 a 9 años de acuerdo a la alícuota vigente con la publicación de la ley en el Boletín Oficial”, dice el proyecto en uno de sus fundamentos. En concreto, en trigo y en maíz por ejemplo se llegaría a 0% en tres años mientras que en soja también se alcanzaría ese nivel en ocho años.
Según trascendió, en tanto se espera que Córdoba Federal presente con el diputado Carlos Gutiérrez una iniciativa para bajar gradualmente las retenciones, hasta que desaparezcan, a cuenta de Ganancias. Juan Schiaretti, gobernador de esa provincia, al abrir esta semana las sesiones de la Legislatura Unicameral señaló: “Córdoba reitera el reclamo que se elimine las retenciones a las exportaciones. Este impuesto no existe en ningún lugar de nuestra Latinoamérica ni en el mundo. Que se lo haga gradualmente y, hasta que desaparezca, esté a cuenta del impuesto a las ganancias. Y que se eliminen inmediatamente las retenciones al complejo lácteo, al complejo manicero y al complejo de legumbres”.
Después de que el Gobierno se quedara sin la aprobación del presupuesto 2022 donde aspiraba a quedarse con el manejo de la potestad de las retenciones inclusive hasta 2024, el debate está abierto. ¿Están legalmente vigentes? ¿Qué chances hay de un cambio vía la nueva conformación del Congreso?
A los proyectos presentados, vale recordar, también hay que contabilizar el del diputado por Santa Fe y vicepresidente del Pro, Federico Angelini, que impulsó una iniciativa para bajar a 0% las retenciones en soja y en maíz para las zonas declaradas en emergencia.
Plazos
Se venció el 31 de diciembre último un plazo dado en 2019 al presidente Alberto Fernández para el manejo de las retenciones. El jefe de Estado, no obstante, el 15 de diciembre pasado había firmado un decreto para fijar las alícuotas desde el 1° de enero de este año. Para muchos, con el rechazo en el Congreso todo quedó sin sustento para las retenciones, incluso el decreto. La rural sondeó con el estudio de abogados Cassagne el tema de las retenciones. “La legislación que habilitaba al Poder Ejecutivo a fijar retenciones ha concluido”, remarca la entidad.
Entonces, ¿se viene una judicialización? No hay una definición terminante. Pero, si se diera ese paso, la recomendación que circula por estas horas es que las presentaciones las hagan productores o rurales del interior argumentando el daño ocasionado. En otro caso la Rural lo podría hacer, no sola, sino representando eventualmente a un grupo de productores.
Sin duda, el asunto de las retenciones es picante (el año pasado significaron el 9% del gasto público) e incluye otros costados, incluso en la relación con el FMI. Alejandro “Topo” Rodríguez, diputado nacional y presidente del Interbloque Federal, lo graficó así: “El actual Gobierno y el que venga, cualquiera sea el color político, pueden quedar atados al compromiso que surja de un eventual acuerdo con el FMI, que implica lograr equilibrio fiscal en 2025. En ese marco, no van a aceptar de un día para otro tener cero retenciones. Queda el camino de una reducción gradual”. Este diputado apoyará la iniciativa que se presente de Córdoba Federal de reducción gradual y pasarlas a cuenta de Ganancias.
En un año complejo por el clima, donde el final de la campaña agrícola se perfila con un resultado incierto por la sequía, el peso de las retenciones, sumado a la brecha cambiaria, se acrecienta. Para el Gobierno, que necesita más dólares, no alcanza con decir que no se tocarán las retenciones. Se necesita una hoja de ruta para bajar su carga y luego eliminar.