Campaña 2021/22 de Trigo enciende un marcado interés

Dicen que pese a la suba en los costos de insumos y alquileres, el grano fino presenta precios favorables a cosecha. También son determinantes las lluvias estos días.

Los resultados económicos que promete el trigo 2021/22 que comenzará sembrarse en poco tiempo en la región pampeana son alentadores. En campo propio y alquilado podría dar una renta atractiva si se alcanzan los rindes de tendencia. Sucede que los precios para la época de cosecha se ubican en torno de los 190-200U$S/t y el margen neto del negocio puede alcanzar los 134U$Sha si se considera un modelo del oeste de Buenos Aires.

No obstante, esa perspectiva alentadora está muy condicionada por la evolución del clima: deberá llover muy bien en las próximas semanas para asegurar la implantación y seguir regularmente durante el invierno y primavera para alcanzar los rindes históricos. También habría que asegurar los precios que ofrecen los mercados a término para la época de cosecha, al menos por una parte de la producción esperada. Con ventas futuras, forwards u opciones- se podrían cubrir los costos que demandará el cultivo por lo menos, informó una publicación del diario La Nación.

En el cuadro que acompaña esa nota se presentan los resultados esperados del cultivo en el oeste de Buenos Aires, en campo propio y arrendado pagando un alquiler de 11qq/ha (compartido con el cultivo de segunda), con un rinde esperado de 45qq/ha. Los datos empleados en los cálculos corresponden a la semana que comenzó el lunes 15 de marzo.

Comparación de costos
Comparación de costosAl analizar los datos de la campaña con mayor detalle Jeremías Battistoni, de la consultora AZ-Group, autor del cuadro, indica que “hay un impacto negativo de los alquileres sobre los costos”. Como son establecidos en quintales de soja por hectárea, y el precio de la oleaginosa subió más que el del trigo, el arrendamiento se encarece en términos reales”.
También hay un aumento de costos directos en el modelo respecto del ciclo anterior, apalancado por un incremento del precio de los fertilizantes, de 38US$/ha más que el año pasado, y de 1,4US$/ha por la suba de los agroquímicos.

La sumatoria de los incrementos de costos exige 5qq/ha más que la campaña pasada para implantar, proteger y cosechar el cultivo. Así, el rinde de indiferencia para cubrir todos los costos llega a 35qq/ha en el modelo de campo alquilado del oeste de Buenos Aires. No obstante, hay que aclarar que el precio que se puede asegurar para la época de cosecha – alrededor de 200US$/t- se ubica por encima del promedio histórico de los últimos años.

El resultado económico daría un margen bruto de 299,3US$/ha en campo propio y un margen neto de 134 en tierras alquiladas, que se ubicarían por encima del registrado en la última campaña, siempre y cuando se aseguren los precios que hoy se ofrecen a cosecha. Combinados con los de la soja permiten proyectar márgenes atractivos para el doble cultivo.

El “precio de equilibrio” del trigo, al cual se saldría hecho en la actual campaña, sería de 160US$/t. Es decir, en la medida que las cotizaciones del mercado se ubiquen debajo de ese umbral, se comenzará a perder dinero con el cultivo.