Margarita Beneitez -mamá del reconocido ingeniero agrónomo Gustavo Duarte- brindó una semblanza sobre las costumbres rurales de su infancia. Hija menor de diez hermanos, nació en 1934 en una chacra donde trabajaba toda la familia.
Cuenta que aún se conserva la casa familiar en el campo que hoy administran sus hijos. Margarita describe el paisaje donde predominaban alfalfares, trigales y maizales que se sembraban con doble propósito, consumo animal y humano.
Resulta lejano para una actividad tan tecnificada en la actualidad dimensionar la ardua tarea que se realizaba antaño, la maquinaria era de tracción a sangre arado de tres rejas, rastra y rolo.
Era un trabajo destinado a los varones de la familia se desayunaba al amanecer y a media mañana se consumían alimentos hipercalóricos como carne y huevos fritos que ella misma llevaba a sus familiares.
El tiempo de cosecha lo describe como una ceremonia: el maíz se cosechaba a mano, con cuadrillas de trabajadores golondrina que venían con sus familias, se juntaba por surco y las bolsas de maíz y el trigo a máquina. El trigo se embolsaba, se cosían las bolsas, se subían a una rastra y se estibaban en galpón.
Rememora además la antigua escuela de Villa Sena, donde ella, sus hermanos y vecinos se educaron. Margarita destaca como diferencia principal con la actualidad que la gente vivía en los campos, establecía vínculos en su lugar y el campo era fuente de trabajo para muchas personas.
Audio de la entrevista a Margarita